MÓNACO Y SUS LOCURAS
Domingo soleado en Montecarlo, sin previsión de lluvia.
Estrategias a la hora de decidir los neumáticos y estrategia para ver las paradas.
Uno de los puntos clave de este circuito es la salida, el no tener accidente y el poder adelantar posiciones es importante, ya sabemos que adelantar en ese circuito se hace complicado, siendo los puntos para hacerlo muy pocos así que todo lo que se adelante en la salida no tendrás que hacerlo en las paradas en boxes.
Salida sin consecuencias, manteniendo las posiciones, pero mostrando sus cartas, intentado enseñar morro al coche de delante sabiendo que será carrera complicada, con más trenecito que espectáculo, pero aquí todo puede pasar, el lo bueno que tiene Mónaco que cuando la carrera se vuelve aburrida y estás pensando en que cuando acabará, todo se vuelve del revés y comienza el espectáculo.
La estrategia de Ferrari era clara, pensar casi en el final de carrera, manteniendo los neumáticos, y no arriesgar demasiado para poder acabar la carrera y puntuando.
Como si el día de la marmota se tratara Felipe Massa volvió a tener el mismo accidente que tuvo en los libres del sábado, coche destrozado, Santa Devota se le atraganta, dolor en la espalda que se unía al golpe del sábado, quedaba fuera de carrera y Safety Car para el resto ....
Pero aún veríamos más al coche de seguridad en este Gran Premio, Chilton toca a Maldonado destroza su coche y vuela contra el guarda raíl, sin opciones a frenar cae sobre las protecciones que se mueven y en esta ocasión aparece la bandera roja, coches parados en la parrilla manteniendo sus posiciones y se relanzará la carrera después del Safety Car salida nueva.
Alonso perdió posición con Sutil con mucho mejor ritmo en carrera adelantaba en Loeb al español, pero todavía quedaba otro coche de seguridad, Grosejan se llevaba por delante el Toro Rosso de Ricciardo y se quedaba en su morro delantero con el alerón trasero de Ricciardo, otra vez relanzamiento de carrera y a tirar hasta el final.
Aún nos quedaba ver como el Ferrari perdía fuelle, algo estaba pasando, y es que después de la salida de Sergio Pérez, parte de su alerón quedaba bajo el monoplaza del español y hacía que su ritmo en carrera fuera aún más lento que lo había demostrado el fin de semana.
El gran beneficiado de este gran premio era sin duda Sebastian Vettel que veía como acababa segundo por delante de Hamilton, Raikkonen y Alonso grandes rivales para el título y los aventajaba en puntos.
Podemos decir que este gran premio ha sido uno de los más accidentados, donde muchos factores han alterado el ritmo de carrera y han hecho que las estrategias no fueran lo más importante.
Ahora sólo nos queda esperar al Gran Premio de Canadá y ver cómo se comportan los monoplazas en un circuito más normal que el de Mónaco.
Fdo. Mª Mercedes Mateos.
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